Infierno

Bajo mi piel descansa un infierno de placer.
Es culpa fría, calor excitante.
Duda que tambalea ante el instinto invencible.

Este infierno me persigue desde que mis pies olían a bebé.
Pureza y obscenidad.
Pecado incontrolable que se te cuelga, araña y te desnuda.

Este infierno agridulce
donde me escondo y encuentro,
donde callo y grito,
donde hacen eco mis extremos.

Este infierno
es sólo mío.

Comentarios